miércoles, 16 de mayo de 2012


Bueno, pues aquí os dejo otro comentario de un cuento con más actividades que podéis hacer para trabajarlo con los niños.

¿A qué sabe la luna?

*Posibilidades de explotación
Crear una canción o poesía para recordar el orden y serie de los animales que intervienen. Decorar la clase con los personajes y colocarlos en el orden que aparecen uno sobre otro, debajo de una gran luna llena. Comentar con lo niños a qué creen ellos que sabe la luna. También se podría llevar a cabo un teatro de sombras.
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Se pueden extraer diferentes actividades a realizar con la lectura de este libro:
Ø  Realizar un cuentacuentos que incorpore como temática el mundo de los animales.
Ø  Presentar una representación teatral, con marionetas y con la participación de los padres en el propio aula.
Ø  Crear entre todos un poema del propio cuento y recitarlo desde diferentes lugares.
Ø  Posibilitar, un espacio que refleja las acciones del cuento y sean ellos mismos los protagonistas y finalmente que expresen como se han sentido al vivenciarlo.
Ø  Trabajar de forma lúdica y educativa el tema de la Luna y todos sus misterios que esconde.
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Desde mi punto de vista este libro lo pueden leer perfectamente los niños solos en clase. Incluso podría hacerse que un niño leyera el libro a los demás. Es muy fácilmente interpretable y podría dramatizarse aunque con algún matiz.
En cuanto a las actividades, del libro se pueden sacar unas cuantas ideas ya que la estructura del cuento da pié a ello. Se puede recurrir a actividades en las que los niños deban ordenar los animales por su aparición, enumerarlos, contarlos… incluso se les podría proponer que fueran ellos los que decidieran qué animales pondrían en lugar de los del cuento en función de las características que tuvieran.
El juego que podríamos decir que dramatiza el cuento sería, por ejemplo, uno en el que en una de las paredes de la clase se coloca un pastel redondo simbolizando la luna o cualquier otro premio que pueda repartirse a todos. A los niños se les coloca en la pared de enfrente y se les pondrá la regla de que tienen que estar tocando la pared en todo momento para poder disfrutar del pastel. De esta manera los niños deberían hacer una cadena (simulando la pirámide del cuento) para alcanzar el premio y repartírselo entre todos.
También podría planteárseles a los niños antes de la lectura del cuento, como motivación, que a qué creen que sabe la luna y por qué. Y así después de la lectura del libro comparar los resultados o decir a que sabe su luna (ya que la luna del cuento sabe a lo que más les gusta a los animales)

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